Bienvenida sea la soledad. La soledad nos acompaña siempre, sólo que nos gusta esquivarla buscando a otras personas. Siempre está ahí, pero pocas veces la buscamos para aprender de ella.
No podremos estar tranquilos jamás hasta que podamos estar
solos y en paz con nosotros mismos en soledad. Nunca seremos libres si no nos
libramos de las cadenas de búsqueda de atención y consuelo externas.
No hablo de olvidar a los demás o repudiar su compañía,
hablo de fortalecerse día a día para ser mejor persona, para crecer sobre
nuestras propias limitaciones, para liberarnos de las cadenas que están lastrando nuestra evolución.
En un camino muy duro y debe hacerse en soledad. Porque
siempre estamos solos. Nacemos solos, crecemos solos, vivimos solos y nos
morimos solos. Solos ante nuestra experiencia interna, ante nuestra
construcción de este mundo en el que nos ha tocado vivir.
Para estar bien con la gente debemos librarnos de la gente.
Es llegar al punto de tener mi mente llena y en paz. Porque si no consigo esto,
estaré incompleto y trataré de que los demás llenen ese vacío... y eso no es
bueno. Cuando no te necesite sabré que es cuando puedo conocerte realmente como
eres, cuando podré quererte si lo mereces y podré dejar de hacerlo cuando
proceda.
El vacío es lo que permite que un vaso contenga el líquido,
que la cuchara recoja el alimento. Cultiva el vacío como medio de abrir tu
mente y liberarte.
Es una de las batallas más duras de librar, pero es también
una de las más importantes, el vacío es una de las pocas certezas de esta vida,
diría que junto con la muerte, la más presente de todas.
Porque buscamos constantemente la manera de llenarnos y conseguir
más y quizás lo que nos ayudaría más y mejor es cultivar el opuesto, vaciarnos,
abandonar todo deseo y atadura, para así no necesitar nada y por ello, ser
libres y disfrutar con lo que venga.
El vacío que propugno es el relativo al vacío de la mente
cuando ésta está en paz, cuando podemos dejar la mente fluir y aceptar todo lo
que venga. Es un estado muy similar al sueño, donde los límites de la mente
están un tanto difusos.
El vacío debe cultivarse, es como una planta, requiere
cuidados y atenciones. Con un bebé vemos claramente el estado de vacío. No el
suyo, sino el nuestro, pues delante de ese bebé somos diferentes, puros,
inocentes incluso.
Una persona que no puede estar sola y sacar algo bueno de
ese estado corre peligro en la sociedad actual. Porque la sociedad actual trata
de vender un falso estado de bienestar donde se equipara la imagen, la
apariencia y la posesión de objetos materiales al desarrollo del individuo y
esto no siempre otorga esa prometida felicidad.
Ahora es Ahora, no ayer, no mañana. No hay futuro, hay
presente. No hay pasado, hay presente. No hay nada si cierro los ojos.
Si nada necesito, es entonces cuando puedo llegar a ti realmente. Si nada
deseo, de nada carezco. Y el que de nada carece, lo tiene todo. Y porque nada
pierde, todo posee. Porque nada extraña, acepta todo. El vacío es lo que
permite que algo sea llenado.
¡Salve sclave!
Aitor Jaén
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Hola, puedes dejarnos si lo deseas un comentario. Éste será revisado y publicado si cumple las mínimas reglas de educación, respeto, tolerancia, etc...